Los aftas son un problema común que puede causar molestias significativas. Aunque normalmente no son graves, pueden interferir con tu capacidad para comer, beber e incluso hablar. En este artículo, exploraremos las causas de los aftas, cómo identificarlos y las diversas formas de tratarlos y prevenir su aparición.
¿Qué es un afta bucal: definición y tipos ?
Definición de afta bucal
Un afta, también conocida como estomatitis aftosa, es una úlcera benigna y dolorosa que se forma en el interior de la boca. Estas lesiones tienen generalmente entre 2 y 10 mm de diámetro, son redondas u ovaladas y presentan un centro amarillento o grisáceo rodeado de un halo rojo intenso. Es importante destacar que los aftas no son contagiosos y suelen aparecer en las membranas mucosas dentro de los labios, las mejillas y debajo de la lengua.
Diferentes tipos de aftas
Los aftas se pueden clasificar en tres categorías :
- Aftas menores: son los más comunes, pequeños (hasta 1 cm), suelen curarse por sí solos en un plazo de 7 a 17 días.
- Aftas mayores: son menos frecuentes, más grandes (más de 1 cm) con contornos irregulares. Estos pueden dejar cicatrices y necesitar un tiempo de curación que puede durar hasta 6 semanas.
- Aftas herpétiformes: son muy raros, aparecen en forma de pequeñas ampollas que pueden fusionarse en una gran llaga.
Al comprender mejor lo que es un afta, podemos identificar los síntomas adecuados y buscar el tratamiento adecuado.
Síntomas de las aftas: cómo reconocerlas
Síntomas iniciales y aparición de aftas
Antes de la formación de un afta, existe una fase prodómica donde las personas experimentan una sensación de ardor, picazón o tensión en el área afectada. Este malestar puede durar de 24 a 48 horas. Después de esto, la úlcera aparece y puede causar dolor al comer o beber, o incluso al cepillarse los dientes.
Aquí sólo hemos arañado la superficie de este tema. A continuación, discutiremos las posibles causas del problema.
Las múltiples causas posibles de las aftas
Factores contribuyentes comunes
Los estudios aún no han determinado exactamente por qué se producen las aftas. Sin embargo, se ha observado que varios factores parecen contribuir a su desarrollo :
- Estrés y fatiga : Se citan comúnmente como disparadores.
- Alimentación : Algunos alimentos ácidos (cítricos, tomates) o irritantes pueden provocar su aparición.
- Traumatismos : Las lesiones bucales, como las causadas por un cepillo de dientes o un aparato dental, pueden ser factores desencadenantes.
- Factores hereditarios : Algunas personas pueden tener una predisposición genética a desarrollar aftas.
Sabiendo esto, podemos tomar medidas para prevenir o aliviar los aftas.
Tratamientos y remedios para aliviar las aftas
Opciones de tratamiento disponibles
Aunque la mayoría de los aftas se curan por sí solos, hay varios remedios y tratamientos que pueden ayudar a aliviar el dolor. Estos incluyen enjuagues bucales, productos tópicos y analgésicos.
Al conocer estos tratamientos, podemos manejar mejor nuestras condiciones. Sin embargo, también es importante aprender a prevenir estas úlceras en primer lugar.
Prevención de las aftas: consejos y buenas prácticas
Buenas prácticas para prevenir las aftas
La prevención de las aftas puede implicar ajustes en la dieta, evitar alimentos irritantes y mantener una buena higiene bucal. Además, aprender técnicas de manejo del estrés puede ser útil ya que el estrés se ha identificado como un posible factor contribuyente.
Este artículo no estaría completo sin discutir cuándo deberías buscar ayuda profesional.
Cuándo consultar a un profesional de la salud en caso de aftas recurrentes
Cuándo buscar ayuda profesional
Si experimenta aftas recurrentes o síntomas severos, es aconsejable buscar ayuda médica. Un profesional de la salud puede descartar otras condiciones y explorar opciones de tratamiento más adecuadas.
En resumen, las aftas son úlceras bucales comunes pero molestas que pueden interferir con tus actividades diarias. Aunque la mayoría de las veces son inofensivas y desaparecen por sí solas, hay varias formas de tratarlas y prevenirlas. No dudes en buscar ayuda médica si tienes aftas recurrentes o si presentan síntomas severos.
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