¿Sientes el frío ya? Te mostramos cómo reutilizar los huesos de cereza para mantenerte cálido este otoño y durante todo el invierno.
Con el invierno a la vuelta de la esquina, las temperaturas empiezan a caer. Esto nos invita a quedarnos en casa; las noches son más frescas. No es necesario que tu factura de electricidad se dispare para mantener el calor. Hemos encontrado una solución gratuita y ecológica: ¡convertir huesos de cereza en una bolsa de agua caliente reutilizable! Aquí te lo explicamos.
Preparativos para recibir el frío en casa
El otoño ya se ha establecido, y el clima comienza a ser helado. Es el momento perfecto para crear un ambiente acogedor. Para prepararte para el frío, verifica el aislamiento de puertas y ventanas. Aun las pequeñas corrientes de aire pueden enfriar tu hogar y aumentar tu consumo energético. Para evitar esto, usa burletes y cambia tus cortinas ligeras por modelos más pesados. Además, recuerda ventilar tu hogar regularmente para evitar la humedad y permitir la circulación del aire caliente.
Además, una excelente estrategia es vestir tu hogar con varias capas de confort. Usa mantas, alfombras gruesas y tejidos de lana para generar calidez. Así, puedes disfrutar del otoño sin necesidad de encender la calefacción, lo que te permitirá ahorrar energía.
Crear una bolsa de agua caliente con huesos de cereza
Para evitar el frío, aprovecha los huesos de cereza. Tienen una sorprendente capacidad para retener el calor. Son ideales para hacer una bolsa de agua caliente casera y reutilizable. A continuación, te explicamos cómo hacerlo en pocos pasos:
Necesitarás:
- Alrededor de 500 g de huesos de cereza (limpios y secos)
- Un tejido resistente al calor (preferiblemente algodón o lino)
- Una máquina de coser o aguja y hilo
Los pasos son simples:
- Limpia los huesos: lávalos bien para quitar cualquier pulpa. Hiérvelos unos minutos y sécalos. Déjalos secar al aire libre durante días.
- Prepara la funda: corta dos piezas de tela del tamaño que desees (más o menos 20 x 30 cm). Coloca las piezas una encima de la otra, con el lado interior hacia afuera. Cose tres lados y deja uno abierto.
- Rellena la funda: añade los huesos hasta la mitad. No la llenes demasiado para que se mantenga flexible.
- Cierra la bolsa: cose la abertura restante a mano o con la máquina.
Para usar tu bolsa de agua caliente, solo colócala en el microondas entre 1 y 2 minutos. La calor se dispersa y proporciona calor durante horas sin riesgo de quemaduras.
Otras ideas caseras para combatir el frío
Si te gusta la idea de la bolsa de cereza, aquí hay tres alternativas sencillas y económicas para mantener el calor en casa:
- Un cojín térmico de arroz: es una buena opción si no tienes huesos de cereza. Cose un trozo de tela de algodón, rellénalo con arroz crudo y caliéntalo en el microondas.
- Patucos de lana reciclada: transforma viejos suéteres en cómodos patucos. Corta la forma de tus pies, agrega una suela antideslizante y cose los bordes.
- Velas caseras: con cera de abejas y mechas, puedes hacer tus propias velas. Al encenderlas, proporcionan un ambiente cálido y acogedor.
Ahora estás listo para enfrentar el invierno sin gastar mucho dinero.
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